¿El último cultivo encontrado en la granja? Paneles solares.

El enfoque podría ser una bendición tanto para la generación de energía como para la producción de cultivos. Menos luz solar directa ayuda a mantener las plantas más frescas durante el día, lo que les permite retener más humedad y, por lo tanto, requieren menos riego. Tener plantas debajo de los paneles solares también reduce la cantidad de calor reflejado por el suelo, lo que mantiene los paneles más frescos y los hace más eficientes. Los trabajadores agrícolas que cuidan los cultivos también se benefician de las temperaturas más frías, al igual que los animales de pastoreo.

Los agrovoltaicos pueden ayudar a reducir el estrés por calor en las vacas lecheras

JOE DELNERO/NREL

La adopción a gran escala de la práctica podría ayudar a reducir las emisiones de dióxido de carbono en los Estados Unidos en 330 000 toneladas al año y agregar más de 100 000 empleos rurales sin afectar mucho el rendimiento de los cultivos. Un estudio de 2019 en la revista Scientific Reports predijo que los paneles solares podrían satisfacer las necesidades energéticas del mundo si menos del 1% de las tierras de cultivo se convirtieran en sistemas agrovoltaicos.

Combinar la agricultura y la generación de energía tiene múltiples beneficios, dice Joshua Pearce, experto en energía solar de la Western University en London, Ontario. “La energía solar y la mayor eficiencia en el uso de la tierra valen dinero y, por lo tanto, aumentan los ingresos por un acre determinado para el agricultor”, dice. “La comunidad local también se beneficia al proteger el acceso a alimentos frescos y energía renovable”.

Pero los investigadores aún están buscando las mejores formas de implementar sistemas agrovoltaicos. Una variable es la altura: en Jack's Solar Garden, por ejemplo, los científicos están experimentando con paneles elevados a seis u ocho pies del suelo. También está la cuestión de qué tipos de plantas responden mejor a la sombra adicional de los paneles solares.